Y aquí estoy… a unos pocos miles de kilómetros de casa, de mi entendida como zona de confort, y que en la primera noche solo me surgía…¿Que demonios hago aquí?
Aun recuerdo como surgió la idea, el embrión de esta aventura, decidir sacarme el pasaporte porque quería, deseaba, ansiaba ver mas, ver de primera mano todo aquello que, una de esas personas, eras tu, contaba de la gente allende los mares, de pescadores que buscaban en islas aledañas, el remedio para tus quemaduras de ese sol que para ellos, solo les acaricia, o de ti también, que en tu recorrido de tierras cercanas, ahora asoladas por una guerra, decías, contabas que eran todo un ejemplo de amabilidad con los forasteros.
Te reconozco cierta envidia que me invadia, celos quizás porque se atrevían a realizar , lo que para mi eran sueños y fantasías.
Así que me propuse no dejar en el tintero esa duda permanente, y ahí comenzó esta aventura.
Me dije que porque no, al fin y al cabo, las revistas, las fotos, los comentarios de gente que se había acercado a estos lugares, avisaban de que era otro mundo, una especie de paraíso, virgen por explorar, con pocos turistas al año, algo que sigue siendo cierto, pero no me avisaron del coste, de esta abrumadora sensación que, aun ahora me llena.
Has de entender que, a pesar de que sigo proclamando lo a gusto que estoy solo…aquí lo estoy de verdad, salgo a una calle con la que tengo que lidiar con mil y una motocicletas y un sentido de la circulación que podría resumirse en un… ¡¡¡sálvese quien pueda!!!, a una serie de olores intensos, para nada desagradables todo hay que decirlo, pero que golpean mi cerebro, a imágenes que solo habías visto en la tele, o te habían contado tus abuelos cuando la posguerra, containers de barco aprovechados como vivienda, como negocio de venta de combustible,con ciertas miradas de curiosidad, con un continuo bon día que te dedican, con taxis que solo salen a hacer su recorrido cuando este se llena de cuatro, cinco o seis personas que fueran al mismo destino… igualito que en Barcelona.
¿Y el idioma?
Para que voy a engañarte…es lo mas frustrante que puedas imaginar, ni nazin de nazin de ingles, con el portugués que hablan aquí, que a duras penas pillas cinco palabras de cincuenta y creyéndote que te están diciendo de todo o diciéndose entre ellos..vaya panoli de guiri…no ayuda a tranquilizarme.
¿Y el tiempo?
Me parece estar en otra dimensión, en otro planeta en el cual, los días no tienen las 24 horas del nuestro, sino mas bien 37, una actividad llena, intensa durante el día, y al cerrarse el sol…por no haber, apenas hay alumbrado publico¡¡¡.
Si, ya lo se, se lo que vas a decirme, por un poco mas, por mirar mejor, por cualquier razón de las que pudieras decirme, podría estar en una situación no tan abrumadora como la que te estoy describiendo, pero como decía a mi alma gemela… hay quien vive exprimiendo cada instante, y esos son los que pueden y tienen todo el derecho de decirse a si mismos…yo viví.
Y eso decidí hacer, aceptando todo esto que, por cierto, nunca creí sentir.
Creo que, con mucha diferencia, este es un viaje que va a marcarme, tener todas estas sensaciones…se que en cuanto llegue a casa, voy a apreciar a quien tengo cerca, voy a tener mucha mas idea, cuando estoy trabajando con alguien que se encuentra como yo, perdido, sin apenas quizás saber o entender que son esos sonidos que escucha, y con el agravante de estar enfermo.
No, se que no volveré siendo el mismo, es imposible cuando se cruza la frontera, la de los países que me vieron volar en sus cielos para llegar aquí, la frontera de atreverme, de decirme a mi mismo que ¡¡¡ Porque no!!!, la frontera de sentirme, no ya desvalido, sino aquella que cruzas cuando sales de cierta comodidad que , vista la distancia, no sabemos apreciar.
Como decía Paco, no es su nombre pero le gusta que le llamen así, un Saomates que he conocido hoy…el mundo es muy grande, pero como en casa, en ningún sitio, un puerto de llegada ansiado , aun cuando desees estar en el de salida para otra próxima aventura.
No puedo, ni deseo, olvidarme de agradecer a Sonia, de http://www.Karebaviajes.com, quizás pensaras que otra agencia de viajes mas.. pero va ser que no, porque es alguien con una ética de trabajo increíble y unos preciosos ojos, esto ultimo no es una apreciacion mia, solo constato una tremenda realidad, en la gestión de como se esta llevando esta aventura mía y a la que debo un montón de consejos y ánimos para esta aventura miá y de la que sin duda… repetire¡¡¡.