Volvi…

Por si quedaba alguna duda… esta es mi isla…

Ha sido llegar, mas bien ver la linea de costa desde el avión y comenzar a sentir una especie de tranquilidad que no albergaba desde hacia tiempo.

Mi tercera ocasión que visito ya unas carreteras conocidas, unos parajes que muchos ya me dicen que si no me aburren..

Pero como decirles que no es la vista?,

Que es algo que surge de mucho mas que un solo sentido?

Es recoger el coche que me permitirá recorrer o acercarme a esos rincones vividos anteriormente…

Es cerrar los ojos, hoy mismo, en un simple banco de uno de estos pueblos, y sentir ese calor que apenas surge, estamos en Marzo, e incluso aquí, el tiempo se nota.

Es comer esas papas con carne mechada…

La cerveza Dorada…

Es mirar en la oscuridad, cercano a un acantilado y no ver esas olas que golpean sin cesar, pero que las sientes ahí… lanzándote el desafió de ser mas fuertes que ellas…

Es mirar por primera vez atrás…

Recordar…

y sobre todo, como me decía un viejo pescador de esta isla…aceptar.

Quizás lo mas difícil de todo en este mundo…aceptar.

Y aquí estoy, en una de esas encrucijadas personales que pudieran irte surgiendo, con quizás dudas y mas dudas por como es lo correcto, cuando en realidad lo correcto, lo acertado, solo lo sabrás después, cuando te hayas atrevido, cuando lo hayas intentado, cuando lo pruebes.

Ilusos somos de creer que lo sabemos todo, que podemos tener el control de aquello que aun ha de suceder, que poseemos las herramientas, las experiencias, quizás incluso la sabiduría que nos da la edad…

Cuando en realidad, nunca sabemos nada.

Conozco a personas, increíbles ellos en sus logros, envidiados por algunos por atreverse, y de los que desconocen los miedos que les surgieron cuando se atrevieron..

Damos la imagen, o creemos que la damos y la dan, cuando en realidad, tengas el tiempo adquirido en tu piel que sea, a pesar de todo lo que hubieras sido capaz de vivir, de creer que estas de vuelta de lo que la vida pudiera ofertarte…siempre aparecerá el miedo.

En mi caso es el miedo que me ha surgido, en esta etapa vital miá, ha sido el miedo surgido de mi pasado, un pasado que creía haber dejado atrás, olvidado, borrado, tapado por mil y una capas de olvidos..

Y aquí estoy, en esta isla, especial para mi, en la que los vientos continuos, aquellos que nunca desaparecen, me limpian de nubarrones mi memoria, me dejan con lo que la verdad, quizás incomoda, olvidad por conveniencia, pero nunca borrada en realidad de ella.

Es en esta isla, donde estar cerca de olas que golpean con inmensa fuerza unas rocas que con el tiempo desgastan, me miran y me sonríen, y me dicen..

Nada es eterno.

He vuelto a esta isla, para cuando en el anochecer de mis días, me invada el recuerdo de lo que hice, de aquello que no me atreví, de lo que nunca pude decir, de lo que quizás hice, de todo aquello que me persiguió durante toda la vida, cuando llegue ese momento, pueda recordar donde por primera vez, me limite a lo mas simple y difícil de una vida…

Aceptar.

Vuelvo a la isla donde mañana paseare en una barca, Magua se llama, con la compañía de uno de esas personas que siempre sabes que dejan huella y a la que, tras un buen par de pipas fumadas y no menos de unas cuantas viejas asadas, perdón, se llama a si a un pescado de esta zona, nos pondremos al dia de la locura de mi pedazo de mundo y a la espera de que me cuente como la ve el.

He vuelto a mi isla…

El Hierro.