Volver a sentir

¿Como ha comenzado esto?. porque lo cierto es que estoy escuchando el parte de la mañana, previo a comenzar mi turno y aquí estoy a la espera de ver si llegas y me concedes ese abrazo que ayer me prometías, tu, la persona que, con diferencia , mas me esta revolviendo el alma, el pulso, la cabeza…

Y llega, llego ese instante, tus brazos se enroscan en mi cuello, te huelo la piel ¡¡Por dios!!, hueles increíble, y casi casi, te alzo entera, no queriendo separarme mas allá de unos centímetros de ti.

Pero tengo que dejarte, hay trabajo y mas aun, hay que evitar en la medida de lo posible que desee que caiga un meteorito y extinga la vida en este planeta, porque yo, tras ese instante….creo que no podría encontrar nada mejor.

¿Es normal esto me preguntaras?, ¿a estas alturas?, pues si, porque …¿porque no?.

Dentro de todas las alternativas posibles, esta la que hace poco que descubrí, la de esas personas que, una mente iluminada ha descrito como «amortales», personas a las cuales, la edad, no solo ya física, sino aquella «social» que se establece, no les impide seguir disfrutando de los mismos sueños que , durante siempre, durante todo el tiempo que uno recuerda, les apetece, desean, sueñan incluso como parte indivisible de si mismos para seguir siendo lo que son, personas felices.

Soy feliz por estar enamorado, de una manera platónica, pueril e infantil pensaras, quizás incluso como lo que cree ella, que todo es parte de un juego de palabras y un hacer bien un turno de trabajo, que pase ameno, entretenido, divertido incluso, pero no es esa la realidad.

La realidad es que el tiempo me ha hecho ver cuanto necesito el querer a alguien, aunque sea de esta forma, sin una consecuencia física ,mas allá de un «simple» abrazo por su parte o mas aun, un hola en una pantalla de ordenador u móvil indicándome que esta ahí, quizás a la espera de una conversación banal o quizás trascendente, pero todas ellas intensas para mi.

Me gusta tener ese cosquilleo al pensar en alguien, en ti, esa sonrisa que, dentro de esta mascarilla, surge solo al verla, al verte, me gusta contrastar con ella mil y una cuestiones distintas, unas nacidas de mi tiempo vivido y las de ella, tanto mas intensas porque nacen de las ideas que ella ha desarrollado como persona vital que es.

Me gusta pensar, imaginar que en otra vida, otro universo o mundo paralelo, un yo y una ella , tienen su oportunidad, que algo en el le dice que la encontró y quizás en ella le diga que es el, quizás la misma sensación que tengo yo en este instante, aunque en este mundo, en este universo, en esta vida…apareciste justo cuando mas te necesitaba, pero no cuando lo hubiera deseado.

Me gusta poder decir que vuelvo a sentir.