Por…..

Como veras, la de hoy, no es para compartirla, al fin y al cabo, solo es una carta para darte las gracias.

Por haberme permitido soñar contigo, sueños que en alguna ocasión me atrevi a contarte.

Por poder contar que te conoci, te conozco y se que seguire conociendote.

Por permitirme tener una cicatriz en mi, quizas una mas, como dirian, pero yo he sido el elegido por tenerla, no siempre las heridas dejan cicatrices, en este caso, es como la marca en la guerra, si, es una buena definición, tengo una nueva cicariz que atestigua que estaba de pie, que no me arrugue ante el “peligro”, que incluso ahora, puedo enseñarla con orgullo, porque no a todos los mortales les ha sido permitido ser destinatario de tu atención.

Esta lloviendo ahora, justo al lado de estos cristales que me separan de la calle, y al estar entreabiertas las ventanas, vienen a mi nariz mil y un aromas distintos, el de la arena de playa mojandose, el ruido de las gotas al caer en un paraguas, ensordeciendonos con su rumor……hay mas recuerdos, pero tal como te decia, seria hipócrita si no me lamentara de no poder crear mas.

Hay una cosa que quizas no te he dicho, que quizas no sepas pero es de justicia que la conozcas.

Esta vida da muchas vueltas, imaginate si las da, que he tenido que conocerte justo cuando ambos quizas mas lo necesitabamos¡¡¡, pero has de ser consciente que quizas nos permita dar mas aun.

Abundan tus elogios hacia lo que yo te he aportado, pero no tiene ningun merito haber hecho aquello que me salia de dentro de mi, cosas que tu habias provocado, crees acaso que eso lo hago con la lechuga?.

No preciosa, no hice nada que tu no me permitieras, el cariño que volque en ti, mis sueños, mis ansias, mis deseos, lo fueron porque me lo pediste sin pedir, porque me diste permiso con esa sonrisa con la que me brindabas.

Ahora estas en una nueva encrucijada, estas de nuevo en pie y aunque no lo sepas, aunque en nuestras vidas aparezcan nuevos compañeros, fijos, estables, continuos, ocasionales, discontinuos, has de saber y aceptar, que estare ahí, detras, a tu lado, delante, porque lo que he llegado a sentir por ti y aun siento, me niegan el olvido.

Siempre es una palabra muy intensa y que utilizamos en ocasiones de forma poco adecuada o correcta, no la utilizare aquí, pero no pienso aceptarte que pienses que tu y yo hemos acabado de coincidir en el camino

Seguire escribiendote mis buenos dias, seguire pensando en ti de forma mas personal durante un tiempo, algo inevitable, pero tambien seguire agradeciendote todo aquello que me has dado, sin saberlo, sabiendolo quizas, pero que me has hecho seguir sintiendo ese cosquilleo en el estomago, ese placer por seguir siendo yo mismo.

Y me toca finalizar, pero lo hare con cuatro palabras.

Si.

Con cuatro, dos ellas las conoces y aunque se suelen decir con mucha ligereza, se que eres consciente del tono en que las empleo, las otras dos, aun estoy mas convencido de que sabras cuantificarlas, al fin y al cabo, es lo que mas deseo.

Te quiero.

Se feliz.